Un comerciante de General Rodríguez, entrevistado por el semanario El Vecinal, relató la situación por la que atraviesa. Ya habría realizado la denuncia en la fiscalía por el “intento de extorsión y represalias” del cual habría sido víctima por parte de la fuerza de seguridad local y funcionarios.
Hace algunos meses atrás se conoció el rumor de que un comerciante local habría sido víctima de extorción y que había logrado documentar la situación mediante material filmico. Con el correr de los días se cupo que finalmente se había realizado la denuncia correspondiente por lo sucedido. Sin embargo hasta la semana pasada no se conocían mayores detalles, pues la victima aún no había realizados declaraciones al respecto.
La semana pasada el comerciante finalmente dio a conocer que fue lo que realmente sucedió. En entrevista para el semanario El Vecinal, el dueño de una reconocida gomería puso de manifiesto la denuncia realizada por el mismo en la Fiscalía N°10 de General Rodríguez, ante un supuesto intento de extorsión por parte de efectivos de la Policía Local y posteriores represalias a raíz de la denuncia.
El mismo sostiene en la entrevista que el miércoles 9 de agosto al mediodía un efectivo de la Policía Local, se acercó hasta su comercio buscándolo para preguntarle por los autos estacionados en la vereda de enfrente. En ese momento dice que pensó que le querían comprar uno hasta que el oficial, le habría dicho: “con quién arreglas vos para poner los autos arriba”, a lo que el comerciante le habría respondido que con nadie, ya que sostiene una buena relación con el comercio. El policía, le habría manifestado que si arreglaba “con nosotros nadie te va a molestar”.
Adivinando la intención, el comerciante dice que le pregunta al efectivo si lo estaba coimeando y este le habría reiterado que le pide “una colaboración”.
Posteriormente, ante la pregunta del comerciante, el efectivo le habría afirmado que lo enviaba “Sergio Cuello”, por lo que lo llamó inmediatamente ya que lo conoce desde temprana edad. El Delegado de Malvinas niega haber enviado a alguien y le manifiesta que lo eche.
Cuando se estaba yendo el efectivo le habría dicho: “ya nos vamos a encontrar en la calle”. Ante la amenaza el comerciante explica que lo empuja contra la pared, “y amagó a sacar la pistola”.
Es en este momento cuando habrían llegado dos mujeres policías. Mientras el comerciante intenta explicarle lo que sucedió, una le habría dicho: “Como le va a faltar el respeto a la autoridad” y le pregunta posteriormente al policía “¿Pero qué te paso Gordo?”.
Al día siguiente Gotta se enteraría, según sus palabras, de quienes se trataba, de “la Jefa de la Policía Local y la otra la Subjefa y el que vino a coimear era la pareja de la jefa”.
Luego se habría acercado el Director de Tránsito, “Luis Billone junto al Jefe de Calle de la Comisaria Primera de la localidad”, quien habría tratado de poner paños fríos, pero para intentar calmar a la oficial, le hace una boleta al comerciante por uno de los “camioncitos” que tienen estacionados al frente del comercio. Al día siguiente “las represalias empezaron a venir”, agregaba el comerciante.
Se habría acercado una persona con un legajo “donde había foto de la gomería, que me había sacado Sergio Fernández desde la otra cuadra por Demaestri. Fue el día que cayo piedra”. Ese día, según cuenta Gotta, permitió que su hijo y un cliente metieran el auto bajo techo para impedir que fueran golpeados por el granizo, esto le habría valido una sanción por “obstrucción del paso a peatones”; “El que escribe eso es Sergio Fernández y es el que tiene a cargo la Policía Local” agregaba el comerciante.
Al lunes siguiente, continúa Gotta en la entrevista realizada por el Vecinal, Billone habría insistido para que se reúnan a charlar, algo que finalmente el dueño de la gomería no acepta. Al día siguiente, “me plantan todo los carteles de Carrefour donde se dice que no se puede estacionar”, aparentemente en represalia porque le tuvieron que devolver el camión, ya que fueron desestimadas “todas las infracciones”.
Sobre sugerencias que le habrían realizado para que se acercara a charlar con Darío Kubar sobre el problema que estaba atravesando, Gotta comentaba: “Yo ya lo había ido a ver al intendente en el caso anterior de coimas que sufrí y en vez de tener soluciones tuve más problemas”. En esa ocasión, según comentó, le clausuraron 8 locales que figuran a su nombre, 2 negocios de él y el resto alquilados, por requerirle algunas exigencias comerciales que solo poseen locales bailables, como el caso de la instalación de una puerta de emergencia que le habría costado 10 mil pesos, como se la debieron encargar especialmente demoro en llegarle lo que le costó una nueva multa, sumadas a otras que ya le habían sancionado.