La Unión Industrial de General Rodríguez emitió un comunicado en el que presenta un balance en el que da cuenta de la preocupante situación que atraviesa el sector debido a las políticas aplicadas por Cambiemos.
Con motivo de realizar un balance luego de su primer año efectivo de funcionamiento formal en la localidad, la Unión Industrial de General Rodríguez emitió un comunicado en el que da cuenta de la preocupante situación que atraviesa el sector debido a las políticas aplicadas por Cambiemos.
El comunicado emite datos de la realidad que son muy concluyentes para el sector y dan cuenta de la pésima situación, por ejemplo indica “en el área Crediticia hemos debido convivir con tasas record de más del 70%, habiendo desaparecido repentinamente los cupos de Créditos Productivos subsidiados para Pymes”.
Además, el comunicado agrega que “la presión impositiva no ha cesado de aumentar, y el gobierno nacional ha modificado la meta inflacionaria para aplicar al balance de las empresas del 33% hasta el 55%, generando en muchos casos ganancias inexistentes donde en realidad, solo hay perdidas”. A eso se le suma “tasas, tarifas de servicios y energía, combustibles, etc., todo varias veces por arriba de la inflación”.
Por otra parte, la Unión Industrial de General Rodríguez hace referencia a las consecuencias de la apertura indiscriminada de importaciones, sin regulaciones ni transiciones programadas, que han golpeado a sectores específicos de la industria nacional. La disminución y eliminación de reintegros a exportaciones industriales y luego la implantación de 3 $ por dólar de retenciones a las mismas, que han definido un claro sesgo anti exportador, con caídas interanuales de más del 15%.
El comunicado agrega que “los efectos de políticas recesivas, de corte netamente monetarista, han configurado un escenario de fuerte disminución del consumo interno, principal mercado de nuestras Pymes”.
Ante este panorama la Unión Industrial expone que el gobierno “debe definir si la atención de los asuntos de la Nación pasan por medidas financieras o por definiciones sobre la industria nacional y la producción”. Y finalmente concluye que “no es posible seguir postergando y segregando al sector industrial y al empresario Pyme, sin entender que constituye la única posibilidad de generar empleo genuino para el 70 a 80% de los argentinos”.