Después de la entrevista que tuvimos con Hebe: los militantes de ATILRA tanto de seccional Gral. Rodríguez, como seccional Capital, el secretario general Seccional Gral. Rodríguez y el delegado general de la comisión interna de Mastellone Hnos. y la juventud también de ATILRA Gral. Rodríguez se nos ocurrió algunas ideas que vamos a desmenuzar en esta columna.
Pareciera que hay dos planos de la realidad: Uno de ellos es el que habitamos aquellos simples mortales, y el otro plano es aquel habitado por seres superiores que poseen una genialidad, tanto en sus actos como en sus respuestas, y que son portadores de una verdad incuestionable.
El plano en el que habitamos aquellos simples mortales camina hacia ese plano perfecto, de donde solo se puede esperar encontrar genios, genias. Parece que por más que nos acerquemos bastante nunca lo alcanzaremos.
Antes de seguir quiero contarle que tuvimos una reunión con Hebe, la idea de esta reunión era que ella nos diga cuál es el camino para enfrentar al neoliberalismo, desde una estrategia valida como clase trabajadora. Ella nos dijo que era hora de un paro general, que no había que esperar más, consideraba que ya no había tiempo y por lo tanto los documentos, las asambleas eran acciones estériles. Para el paro, había que convencerlo a Pablo Moyano, la fuerza de camioneros es determinante para que el paro general sea efectivo. “Un paro le va doler mucho, y no un paro de un día extenderlo a dos o tres días, dejar guardias mínimas en los hospitales (…)” dijo en un memento Hebe, luego se produjo un ida y vuelta, una charla que estaba decorada con anécdotas de todos los colores. Dentro de esas anécdotas conto la de la toma de una comisaria en chile para que los presos puedan ver a sus hijos. No vamos a entrar en detalles por cuestiones espaciales, solo diremos que es una locura, la de tomar una comisaria ella sola y en Chile. “Hay que animarse a hacer locuras” nos dijo sosteniendo que haciendo lo que a uno se le ocurre está ejerciendo la libertad.
La sensación que nos quedó; es que esas locuras solo lo puede hacer Hebe, pues ella es la genia dotada de un sentido de libertad que no reconoce las leyes, leyes, siguiendo su línea de pensamiento, que son escrita por quienes tienen poder para defender sus intereses de clase, leyes que ponen un límite a los pobres para que no puedan reclamar lo que los rico les roban, en definitiva es como lo expresa el Martin Fierro: “la ley es tela de araña y en mi ignorancia lo explico, no le teme el hombre rico, no le teme el que manda pues la rompe el bicho grande y solo enreda a los chicos”. Esas leyes Eve las quebranta, esas leyes no las pueden alcanzar, porque ella, volviendo al principio, parece habitar ese plano ideal, ese plano que nosotros apenas podemos acercarnos. Hasta acá no hemos hecho más que idealizar a Hebe, pero ¿Cómo no hacerlo? Es Hebe, es la que junto a muchas más salieron a la calle cuando la sociedad estaba aterrorizada, salieron a enfrentar al estado terrorista para exigir la aparición de sus hijos.
Claro que es imposible no idealizarla, ¿pero saben qué?, no creo en la idealización, no creo que haya dos planos, no creo que hay genios y genias, no creo en los milagros y no creo en la magia. No creo que haya un estado ausente en un momento histórico y un estado presente en otro, no creo en la existencia del estado como un sistema que tiene vida propia. Creo que esas formas de pensar son cómodas, yo demando derechos, pero ojo no pongo el cuerpo. Le pido a los genios y las genias respuestas y de paso por las dudas también les hago críticas.
Creo que hay dos clases sociales una de ella es la de los y las que trabajan y la otra, es la que vive de los y las que trabajan. Creo que esta clase vividora, privilegiada es egoísta y asquerosamente aprovechadora y no tiene escrúpulos en hacer cualquier cosa para no perder nada de lo que le saquea al pueblo, harán cualquier cosa e incluso desaparecer a quienes frenan su avance, como ya lo hicieron. Desaparecieron 30 000 implementando el terror en la sociedad, quisieron doblegarnos, pero no lo lograron y las Madres de Plaza de Mayo se convirtieron en el símbolo mundial de la lucha y Hebe es parte de esa historia, su lectura de la realidad es producto de su experiencia concreta, de su voluntad tenaz e inquebrantable, del dolor convertido en lucha.
En conclusión, Hebe es tan humana como cualquiera de los nosotros, nosotras, se destaca, es obvio, por sobre cualquier persona pero no eligió estar ahí, ninguna de ellas eligió ser símbolo de lucha. La decisión canallesca de un plan político pergeñado por un grupo de seres humanos las puso ahí y constituyeron una organización de avanzada en la lucha contra la oligarquía acumulando estrategias y saberes de los cuales hay que apropiarse y moldearlas según las características de cada organización teniendo como horizonte claro un proyecto de país donde es necesario desarticular a la oligarquía. Claro que es una locura esta propuesta pero en esa locura esta agazapada la libertad.