Como lo hacen cada jueves desde hace 40 años, las madres volvieron a marchar acompañadas por cientos de personas, entre ellos varios integrantes de sindicatos. Junto a ellas, Pablo Dacovich, tomó la palabra y criticó duramente a los “dirigentes que todavía insisten en acompañar a este Gobierno con la excusa de mantener la gobernabilidad”.
Las Madres realizaron, la marcha 2065 en Plaza de Mayo, como lo hacen cada jueves desde hace 40 años.
Lo hicieron acompañadas por cientos de personas, entre ellos varios integrantes de sindicatos tales como Atilra, ATE, SUCMRA (motoqueros), Curtidores, entre otros, y trabajadores y estudiantes de universidades públicas.
Luego de las dos vueltas alrededor de la Pirámide de Mayo hicieron uso de la palabra el periodista Luis Zarranz, del área de Prensa de la Asociación; Pablo Dacovich, referente de la Juventud de Atilra y de la Corriente Federal de Trabajadores; y Hebe de Bonafini, presidenta de las Madres.
Zarranz valoró la presencia de gremios y sindicatos en el contexto de ajuste que lleva adelante el gobierno y ponderó el tejido social construido por el pañuelo blanco a lo largo de cuatro décadas de lucha.
Luego, Dacovich agradeció en nombre de la juventud, y de su conductor, el secretario General de Atilra Seccional General Rodríguez y referente de la Corriente federal de Trabajadores de la CGT, Heber Ríos, la posibilidad de hacer uso de la palabra en la junto a las Madres y se refirió al “avance de la derecha en Latinoamérica que, en diciembre de 2015, desembarcó en Argentina”.
“Desde la Corriente Federal de los Trabajadores damos la pelea en las calles, en las fábricas junto a los trabajadores, con los docentes, los estudiantes y junto a las Madres”, indicó el referente de ATILRA y citó a Walter Correa, Secretario General del Sindicato de Obreros Curtidores (SOC), quien afirma que los trabajadores son “la última línea para frenar el ajuste neoliberal”.
Ante la posición oscilante de la Confederación General del Trabajo (CGT) frente al proyecto de reforma laboral, Pablo Dacovich manifestó que “la CGT no es una empresa, es el movimiento obrero organizado y su función es sostener la conducción de ese movimiento. Por eso, la batalla también hay que darla ahí dentro. No pueden seguir negociando con los derechos de los trabajadores” y criticó a “algunos dirigentes que todavía insisten en acompañar a este Gobierno con la excusa de mantener la gobernabilidad”.
Por último, Dacovich agradeció a las Madres “por su lucha incansable que lleva más de 40 años” y pidió “continuar la lucha por los 30.000 compañeros detenidos desaparecidos”. Además exigió la liberación definitiva de Milagro Sala y justicia por Santiago Maldonado.
Por último, Hebe de Bonafini, entre otras cosas, se refirió a las declaraciones periodísticas Jaime Durán Barba, quien había afirmado que ella “está enojada con lo que pasó con sus hijos” y que “si Macri quiere mandarle saludos, ella no los quiere recibir”. “Durán Barba dice que estoy enojada por lo que me pasó con mis hijos. Duran Barba, yo estoy enojada con lo que ustedes hacen con los hijos que tengo ahora. Estoy enojada porque los hijos de ahora no tienen trabajo, estoy enojada porque pisoteas a los trabajadores, estoy enojada porque cerrás las universidades, estoy enojada porque recortás los presupuestos de los hospitales, estoy enojada porque me tienen podrida hablando de que son buenos, que estamos bien y nos están cagando la vida desde que nos despertamos. Por eso, estoy enojada, Durán Barba. No seas pelotudo” expresó Bonafini.
“Las Madres transformamos el dolor en lucha y a nuestros hijos en ustedes. No los dimos por muertos, no agarramos plata por sus vidas y sentimos que ustedes son nuestros hijos para asumir la responsabilidad de quererlos, de amarlos y de defenderlos con nuestra propia vida si fuese necesario”, finalizó.