Unir General Rodríguez con el extremo norte del continente americano es lo que se propone esta joven pareja. Para realizar el viaje lo harán en una camioneta combi equipada para la vida cotidiana de los viajeros que dejarán su vida actual para saltar a la aventura.
Ayelén Herrero y Mariano López tienen 26 y 30 años respectivamente. Comparten la afición por los viajes mochileros, pero hasta el momento solo los llevaban adelante en vacaciones. Sin embargo, muy probablemente en febrero, puedan impulsar un paso más lejos su espíritu viajero, pues emprenderán un viaje que unirá General Rodríguez con Alaska, ubicada en el extremo más septentrional del continente americano. Para ello dispondrán de una combi verde equipada totalmente para la vida cotidiana de los viajeros en una aventura que, calculan, les demandará aproximadamente unos 3 años.
Hace 5 años que viven juntos en Villa Vengochea y trabajaban en un Centro de distribución de un supermercado; trabajaban porque hace decidieron renunciar a sus empleos para realizar el sueño de un viaje que planificaban desde hace mucho tiempo. Junto a ellos viajara una perrita maltés, la única afortunada de varias mascotas que tienen.
A pesar de algunos contratiempos de último momento, la fecha que tiene planificada para emprender el viaje es el domingo 24 de febrero, aunque aún no tienen definido el lugar exacto de partida. Intentaran hacer de esta aventura en camioneta una experiencia compartida, pues han creado un perfil en las redes sociales (Facebook e Instagram) llamado La Locura de Viaje, desde donde mostrarán cotidianamente las experiencias que vivan a lo largo de la extensa travesía. Además desde allí avisaran a amigos, familiares y a todos aquellos que quieran acercarse a saludar, la fecha y el lugar exacto en el que comenzara el viaje.
De nuestra localidad, realizaran un primer tramo hacia Entre Ríos. Recorriendo el Litoral, cruzarán luego hacia el Brasil, subiendo por toda la costa que bordea el Atlántico Sur, desde Curitiba “hasta donde se pueda”, con la idea fija de poder conocer el Amazonas.
Una vez comenzada la aventura, recurrirán a varias actividades para poder juntar dinero que les permita continuar con la travesía, entre ellas la venta de fotos y postales, de cuadros bordados y de gorras. Una ayuda para la venta: la camioneta. Ayelén y Mariano afirman que cuando la gente ve la camioneta, automáticamente sabe que se trata de viajeros y se acercan a charlar, a sacarse fotos y también a comprar.
Como el recorrido será largo, los viajantes no descartan la posibilidad de poder realizar algún tipo de publicidad desde varias partes de América, como una forma más de solventar esta aventura que comenzara en breves.