En el mes de septiembre, autoridades políticas y judiciales de la provincia habrían detenido a doce padres por el delito de “intimidación pública, por ser los titulares de las líneas telefónicas” mediante las cuales se realizaron las llamadas. Uno de los procedimientos habría sido en General Rodríguez.
Según trascendió en medios nacionales, durante los últimos 20 días habrían sido demorados 28 menores por amenazas de bombas a las escuelas que asisten. Las investigaciones avanzarían en al menos otros 120 expedientes.
En todos los casos, como las líneas telefónicas están registradas a nombre de los progenitores, serían los adultos quienes sean llevados ante la Justicia. Doce padres de los 28 menores demorados en esas causas ya habrían sido imputados por el delito de “intimidación pública”. Las familias además afrontarían un costo económico, ya que tanto el estado provincial como los municipios presentarían demandas civiles.
En General Rodríguez dos hermanos adolescentes de 15 y 16 años habrían visto, días atrás, cómo sus padres eran llevados esposados tras un allanamiento en su casa.
Sobre la situación, la defensora provincial se manifestó en la misma postura que lo hizo días atrás el defensor regional Gustavo Franceschetti, quien consideró que las detenciones hacia los padres son “una exageración”. Además reiteró la metáfora que usara este al expresar que la medida: “Es como matar un mosquito con un cañón”. Para Balangione, “hay principios como la intrascendencia de la responsabilidad penal: en el campo del derecho civil los padres son responsables si un chico rompe algo; mientras que la responsabilidad penal es imposible de ser trasladada de una persona a otra, y se rige por el derecho penal del acto de determinada persona. En este caso, se le ha trasladado a los padres las consecuencias de un hecho. Se rompe con la lógica del derecho penal”, estimó.
Cabe recordar que en nuestro distrito, en la escuela Parroquial San Carlos Borromeo, semanas atrás se dio aviso de un artefacto explosivo en el establecimiento, por lo cual todas las personas que se encontraban dentro del mismo fueron evacuadas hasta la plaza Martin Rodríguez, y allí los estudiantes debieron esperar hasta que sus padres pasen a buscarlos.
El oficialismo activa un protocolo especial para el día de las elecciones
El Gobierno de la provincia de Buenos Aires comunicó que el próximo domingo pondrá en marcha un protocolo especial en las escuelas donde se vote, para evitar que eventuales amenazas de bomba puedan afectar la jornada electoral.
“Hay que procurar que estas acciones no interrumpan la voluntad de voto del electorado bonaerense”, anunció el ministro de Justicia, Gustavo Ferrari, en diálogo con medios nacionales.
El ministro explicó que antes de la jornada electoral, “el protocolo va a determinar la mejor manera de, previamente, asegurar que no haya elementos peligrosos dentro de ese colegio”. En relación a las fuerzas de seguridad, señaló que “van a actuar procurando tener un refuerzo especialmente en la provincia de Buenos Aires ese día”.
Criticas al protocolo
El candidato a senador por Unidad Ciudadana, Jorge Taiana, y el candidato a diputado, Leopoldo Moreau, alertaron ayer que “el Gobierno está creando un clima de intranquilidad” con el anuncio de que se implementará un protocolo, para combatir las amenazas de bomba en las escuelas. En una conferencia de prensa en el Instituto Patria, los candidatos de UC denunciaron que las medidas extraordinarias, tendientes a evitar que potenciales amenazas alteren el desarrollo de la elección, podrían ser utilizadas por el Gobierno con fines electorales.
“Estamos frente a una patraña extraordinaria que pone en riesgo la tranquilidad del comicio. No hay que suspender ningún comicio ni inventar ningún protocolo particular, hay un comando electoral que garantiza la seguridad y se ha aplicado siempre. La gobernadora (Vidal) y el ministro de Justicia provincial (Gustavo Ferrari) ponen un signo de interrogación sin ninguna razón”, dijo Moreau, y aseguró que se “está preparando una gran mentira con el acuerdo del juez Culotta, un simpatizante del oficialismo”.