El día martes 6 de septiembre, tuvo lugar la Feria Regional de Arte, Ciencias, Tecnología y Educación bonaerense en el Microestadio del Polideportivo Municipal de nuestra ciudad. Se presentaron más de 140 proyectos de investigación realizados por estudiantes y docentes de todos los niveles educativos y en donde participaron nueve distritos de la región, entre ellos, Mercedes, Marcos Paz, Luján, General Las Heras, Navarro, Suipacha, Cañuelas, San Andrés de Giles y General Rodríguez. La feria es uno de los programas de políticas socioeducativas provinciales y tiene como objetivo acompañar el trabajo y el desarrollo de ideas promovidas por los y las estudiantes a través de las instituciones educativas.
Allí estuvo presente el intendente Mauro García, autoridades educativas municipales, distritales, inspectores de enseñanza, docentes evaluadores y la directora provincial de políticas socioeducativas, Natalia Bragagnolo. Previo a la palabra de las autoridades, los y las estudiantes locales de la Escuela Secundaria 13, de modalidad arte-danza, y 17 presentaron una coreografía de danza contemporánea en el marco de semanas de reflexión sobre la no violencia.
La inspectora Jefa Regional, Gabriela Valverde, destacó la importancia que tiene el arte, la ciencia y la tecnología en el desarrollo y crecimiento tanto de la provincia como del país. Así también lo señaló Natalia Bragagnolo, directora provincial de políticas socioeducativas, quien agradeció a las autoridades y a la intendencia de nuestra ciudad “por estar presente cuando se producen articulaciones entre municipios, provincia y nación, lo que significa que todos estamos pensando en una educación mejor y más profunda para todos y todas”, sostuvo Bragagnolo. Además, hizo una mención especial a los y las docentes “que con su compromiso, amor y pasión construyen conocimiento y demuestran que la ciencia, el arte y la tecnología nos permite acercarnos al pensamiento crítico”, agregó.
Por su parte, el intendente Mauro García felicitó a docentes, estudiantes y auxiliares presentes y habló de la idea de construir, mediante estos espacios, un mundo que nos permita vivir en comunidad. “Estos pibes y pibas que están hoy acá son quienes realmente van a transformar nuestra sociedad. Debemos dejar el odio como herramienta de comunicación y empezar a construir lazos que tengan que ver con el amor, que nos permita vivir a todos y todas en paz y armonía, pensando en el otro. Esa es la única manera que tenemos de construir más educación, más cultura, más ciencia y más trabajo, pero sobre todas las cosas, de construir más oportunidades para todos y todas”, concluyó García.
Algunos proyectos que tuvieron lugar en la feria
Durante toda la jornada se presentaron y evaluaron alrededor de 140 proyectos con 600 expositores y 90 evaluadores en total. Hubo proyectos relacionados a temas como el medio ambiente, el agua, el cyberbullying, acoso escolar, robótica, enseñanza, malvinización, entre otros.
“¿Agua solar a nuestro alcance?”
Este proyecto fue presentado por Joaquín y Juan Pablo del Instituto San Luis Gonzaga, ubicado en Gral. Las Heras. Se trata de la realización de un calentador de agua solar casero de bajo costo, fácil acceso, ecológico y sustentable, hecho fundamentalmente con materiales reciclables como botellas de plástico. “Lo que buscamos con este proyecto es dar un reemplazo, en las zonas carenciadas, de los métodos convencionales de energía de una manera de fácil acceso y bajo costo”, explicó Joaquín, quien junto a su compañero pensaron cómo podían involucrar la falta de distribución de energías con la de residuos sólidos urbanos. “Más que crear el dispositivo lo que buscamos es tratar de difundirlo y que llegue a las zonas donde realmente se necesite”, aclaró Juan Pablo.
“Silla en la vereda”
Ignacio y Milagros son del Barrio Sommer, General Rodríguez, y son estudiantes de quinto año de la Secundaria n° 10. Su proyecto trata sobre la pérdida de la vereda como espacio sociocomunitario barrial, donde el disparador del mismo fue una lectura del escritor Roberto Artl. “Concluimos en que la falta de veredas, entre otros espacios sociocomunitarios, afectan la forma más primitiva que tienen los vecinos de comunicarse”, sostuvo Ignacio. “Desde la escuela observamos timidez al hablar, falta de comunicación entre compañeros y luego lo llevamos al barrio y observamos prejuicios contra el nuevo, migración constante entre provincias y países limítrofes”, relató Milagros. Además, en base al proyecto, los chicos lograron construir un playón en su barrio y una vereda en su futura escuela.
“Arte y expresión”
Este proyecto contaba con una serie de fotografías tomadas durante el 2020, 2021 y el presente. Gonzalo y Benjamín viven en San Andrés de Giles y representaron a la Escuela Nuestra Señora de Luján. Presentaron fotos donde buscaron explicar cómo se sintieron durante y después de la pandemia a través del arte con vanguardias del siglo XX. La sección 2020 la titularon “pandemia” y mediante el expresionismo buscaron expresar, con diversas técnicas de efectos visuales, la angustia de lo que fue la pandemia y el estar encerrados. Al 2021 decidieron expresarlo con otra tanda de fotos, la cual llamaron “post pandémica», y utilizaron el surrealismo, donde se buscó procesar y describir el sentimiento de libertad mediante fotos al aire libre. Y por último el presente, lo que denominaron “normalidad- anormal”, a través del futurismo, tratando de expresar la situación actual del medio ambiente provocada por el ser humano. “En la pandemia la naturaleza volvió a tomar territorio y fue mejor, pero cuando nosotros salimos, todo eso volvió para atrás”, subrayó Benjamín.
“Robot: Tokio”
La robótica también fue protagonista en la feria de la mano de la Escuela Técnica de Marcos Paz. Santiago y Máximo son sólo dos del grupo de estudiantes que conforman la parte de robótica. Presentaron su proyecto que consta de tres robots diferentes. Uno de ellos se encarga de captar cubos y sacarlos de un espacio, otro seguía una línea blanca y mediante sensores evitaban los espacios negros y por último, el de Santiago y Máximo, que funcionaba mediante bluetooth. “Estamos haciendo el robot de sumo que consiste en un robot que lo manejamos mediante bluetooth y una plaqueta de arduino. Nosotros sólo hacemos la conexión y programación mediante la computadora lo cual nos lleva dos o tres meses”, explicó Santiago.