El viernes 3, lunes 6, y martes 7 de abril, los bancos van a abrir las sucursales para que puedan cobrar por cajero quienes cobran jubilaciones y AUH, entre otros grupos no bancarizados, y que no tienen tarjeta de débito o está vencida. La noticia fue confirmada anoche a través de un comunicado de la Asociación Bancaria.
La decisión de abrir las sucursales al público, cerradas desde el decreto de aislamiento social preventivo y obligatorio, es evitar las aglomeraciones frente a los cajeros automáticos como las que se produjeron la semana pasada, cuando se registraron largas filas en los bancos.
Además, la propuesta surgió porque debido a la falta de tarjeta de débito más de 2 millones de personas no pueden hacer compras ni extraer dinero de los cajeros automáticos; y porque en muchos barrios, los pequeños comercios solo aceptan el pago en efectivo.
Los detalles de la medida se conocerán hoy, martes. Se establecería un horario especial con una segmentación por grupos, de forma tal de evitar que se reúnan muchas personas en un mismo espacio.
Durante los días de apertura las sucursales bancarias admitirán a las personas «con las distancias de seguridad previstas en la resolución sanitaria» de modo que «el resto deberá realizar la fila fuera de la entidad«.
«Una vez finalizado el horario de atención al público, se orientarán las filas hacia los cajeros automáticos «, informó el gremio conducido por Sergio Palazzo, al tiempo que convocó a los trabajadores bancarios a asistir voluntariamente a las «más de 13 millones de personas» que tienen «la necesidad de contar con efectivo para realizar sus compras, necesarias para subsistir«.