El pasado fin de semana General Rodríguez fue protagonista de una verdadera misa ricotera junto a más de 600 personas. La Chamuyanding Band, tributo a la banda Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota, y la Orquesta Sinfónica Municipal dirigida por su director, Santiago Mastronardi, brindaron un concierto a puro rock sinfónico en la Escuela Nº 1. Allí le presentaron al público una espectacular fusión entre dos estilos totalmente diferentes pero que juntos sonaron increíble.
La presentación tenía como fin recaudar fondos para la compra de instrumentos para la Orquesta del Bicentenario, que constituye el semillero de la Orquesta Municipal, un enorme proyecto que crece día a día y que hoy tiene a más de 120 estudiantes tomando clases.
La Chamuyanding Band es una banda de amigos que se conocen desde chicos y que el año pasado decidieron volver a tocar en conjunto y hacer eso que tanto disfrutaban en su adolescencia. Integrada por Ángel Tato Escobar, en la voz, Rubén Peifer, en el bajo, Mauricio Escobar, guitarrista, Mariano Escobar, en teclado, Galdames Ariel, en batería, Guillermo Franco, en guitarra y Gabriel Muller, quien se incorporó hace un año, es saxofonista e ideólogo de la fusión musical que se vivió el fin de semana, en tributo a Los Redondos.
El concierto comenzó pasadas las 20.30 horas con una sala llena. En escena, con una espectacular puesta lumínica, de sonido y video, se desplegaron 32 músicos y músicas de la orquesta municipal junto a los 7 integrantes de la banda rockera. A partir de ahí, todo fue fiesta.
Durante el show, tanto la orquesta como la banda tocaron de manera individual y luego fueron recorriendo un particular repertorio con temas icónicos como “Reina Momo”, “Un poco de amor francés”, “Me matan limón”, “Ropa sucia”, entre otros, con los cuales cautivaron al público presente que no paró de cantar y agitar un segundo. Luego hubo sorteos de remeras de la banda, viseras, tatuajes y demás.
El gran cierre no podía ser de otra manera. «Ji ji ji» y «Juguetes perdidos» fueron los protagonistas de la noche. Con un cálido pogo de quienes estaban presentes y el sonido de la orquesta al final, coronaron la noche con un extendido aplauso en agradecimiento por tanto arte y talento.
“El show superó ampliamente las expectativas que teníamos en cuanto a la buena onda, cómo surgió y cómo fluyó después, la energía que nos trajeron. Estamos súper contentos y felices por cómo salió todo. La fusión quedó increíble y recibimos comentarios muy lindos de muchas personas”, expresó Ángel “Tato” Escobar, integrante y quien le da voz a la Chamuyanding Band.
Uno de los objetivos de este encuentro cultural, más allá del fin solidario, también se trataba de poder acercar a ambos públicos y compartir lo que cada uno hace. Esto se logró y la gran presencia del mismo fue una grata sorpresa para los músicos. “Si bien imaginamos que iba a haber una gran concurrencia, no imaginamos que iba a estar la sala llena. Eso nos impactó y creo que fue el momento más fuerte para nosotros», manifestó Escobar.
Por último, adelantaron que ya están pensando en realizar otra presentación con la idea de generar más movida cultural en nuestra ciudad. Por el momento, su próxima presentación será el 11 de noviembre en el festival a beneficio «Cipo Fest» en General Rodríguez.