En los últimos días comenzó a resonar fuerte en los medios monopólicos del país un conflicto laboral en la planta de Lácteos Mayol, ubicada en la localidad de Cañuelas.
Desde entonces, la familia propietaria de la láctea inició una maratónica puesta en escena, donde entre llanto y pedidos desesperados de ayuda, acusaron a los trabajadores que ejercían su derecho a huelga en protección de sus derechos, de “mafiosos” y “lacras”. Hasta se animaron a solicitar una medida perimetral.
Pocos fueron los que dieron a conocer las causas de la medida de fuerza iniciada por los lecheros, que por otra parte hay que indicar que se dio de manera totalmente pacífica, y con permanencia policial permanente en el lugar. Como en el caso de Vicentín, pareciera que a nadie le interesó dar a conocer la voz de los trabajadores.
Eso fue lo que remarcó constantemente Heber Ríos, Secretario Gremial y Secretario General de la Seccional General Rodríguez, de Atilra, cuando se refirió a los motivos del conflicto.
«Acá nadie habla de lo que verdaderamente importa, las condiciones en las que tiene la familia Mayol a sus trabajadores desde hace años. Sin registrar, sin aportes, con salarios de miseria, y sin encuadrarlos dentro del convenio colectivo de la actividad, entre otras cosas. Nos tratan como si fuéramos delincuentes, cuando en realidad los que actúan por fuera de la ley, con total impunidad, son ellos. Mienten y se victimizan. Pero estamos tranquilos porque la verdad siempre sale a la luz» indicó.
Las palabras del dirigente sindical fueron confirmadas hoy por la mañana, cuando comenzó a circular en las redes sociales un video en el que se ve a dos integrantes de la familia Mayol, junto a su abogado, después de la conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo, abonando los salarios “en negro”, a los trabajadores que iniciaron la protesta.
Mirá acá el video completo: