Cristina Fernández de Kirchner, en medio de una multitud de militantes, dirigentes políticos, gremiales, Madres de Plaza de Mayo, intelectuales, y simpatizantes dio un discurso político que atravesó diferentes cuestiones de la agenda actual, pero cuyo eje estructurador es la voluntad de generar un horizonte político de salida de la crisis actual y conducir a la sociedad argentina hacia una nueva etapa de estabilidad y bienestar. El acto estuvo lleno de lo que precisamente siempre le faltó al gobierno del Frente de Todos: una construcción política sobre el futuro y el destino de la coalición. El para qué, las ideas fuerza para generar apoyo en medio de la pandemia, la guerra y la deuda que dejó Macri.
Este artículo no sigue un orden cronológico ni hace una ponderación de las cosas dichas por la vicepresidenta. Pero sí pretende abordar cada cuestión dando cierto contexto a lo dicho por CFK para su mejor entendimiento.
El Regreso de la Historia
El discurso comenzó rememorando el regreso de Perón, razón por la que se conmemora el 17 de noviembre como día del militante y llamó a reflexionar, como otras veces, a través de la historia. Volvió sobre la idea de la necesidad de entender el pasado para poder mirar hacia el porvenir, planteo que necesariamente se opone a los discursos liberal-conservadores del macrismo y sus variantes que difunden una mirada sobre la historia muy cínicamente conveniente a sus intereses. CFK referenció esto al hablar sobre el voto universal el cual destacó sólo adquirió tal condición con la incorporación de las mujeres durante el peronismo. También referenció la famosa frase de Macri “fueron 70 años de peronismo”, como remate acerca de la importancia de comprender la historia y haciendo una doble crítica, primero sobre esta mirada falsa de los acontecimientos, y segundo por el grave conflicto entre el ex-presidente y las ciencias exactas.
Al hacer mención a la situación de grave conflictividad social previa a la dictadura que tuvo que manejar el tercer gobierno peronista, destacó la incomprensión en ese contexto del valor de la vida y cómo los procesos políticos posteriores revalorizaron el esto y el fin de la muerte como instrumento político. “Esta fue nuestra gran construcción democrática que lamentable el pasado primero de septiembre se quebró” afirmó CFK, referenciando el atentado sufrido a manos de una organización financiada por empresarios cercanos al macrismo. La vicepresidenta mencionó además que debemos retroceder en materia de estos acuerdos democráticos y criticó duramente a los discursos que plantean la desaparición del otro que piensa distinto como método para saldar las diferencias.
Una Novedad Política: El Discurso de la Seguridad
Uno de los grandes puntos débiles del discurso kirchnerista fue siempre su incapacidad de articular un argumento o una postura frente a la cuestión de la inseguridad sin caer en generalidades. En frente, varios actores políticos se posicionaron haciendo uso de discursos de mano dura, uso de las fuerzas armadas para seguridad interna, agravamiento de penas, compra de armas a países como Israel. Es decir, Massa, De Narváez, Macri, Bloomberg, Bullrich. Durante su alocución Cristina planteó la necesidad de asumir una discusión seria acerca del problema de la seguridad de los ciudadanos, poniendo especial énfasis en los grandes centros urbanos.
Lanzó duras críticas hacia “los debates absurdos porque la democracia tiene una deuda en materia de seguridad de la vida de los vecinos.” Llamó a terminar con el discurso berreta, cínico y mentiroso de los manos dura vs los garantistas. La principal crítica (es decir, Ritondo y Bullrich) fue hacia las políticas de seguridad e inteligencia del gobierno de Macri, que no sólo no generó mejor seguridad, sino que aumentó los casos y le añadió la generalización de los casos de espionaje ilegal. Por otro lado, también habló del crecimiento de problemas de seguridad no asociados con la marginalidad y la pobreza, como el narcotráfico, que no se resuelven con políticas de empleo, pero tampoco con gatillo fácil, y agregó que es necesario restablecer la obediencia de las fuerzas de seguridad al poder civil, criticando la creciente autonomía y corrupción de la policía. Además, recordó el operativo centinela que desplegó Gendarmería sobre el conurbano, y criticó la actuación de la misma bajo la conducción de Patricia Bullrich en la Patagonia (y en la gestión actual).
Para cerrar, aseguró que el orden no se trata de la violencia ni del poder de policía, sino de la paz social, del trabajo y tranquilidad de las familias argentinas. “Ese es el orden” sentenció Cristina.
“Con acuerdo democrático únicamente no alcanza”
CFK planteó también la necesidad de un abordaje serio las cuestiones económicas, es decir, fuera de los eslóganes y la ideologización de las herramientas económicas (devaluar es liberal, gastar es popular), pero también en el sentido de no caer en los discursos que se pretenden equidistantes, pero encubren un perjuicio para los trabajadores y las trabajadoras del país. Como en otras ocasiones, señaló el proceso de distribución regresiva del ingreso y la caída del salario en la participación del PBI. Pero también agregó que la década que surge después de la pandemia implicará graves dificultades económicas para el mundo entero, y esos problemas requieren de acuerdas básicos acerca de hacia dónde ir y qué hacer, pero nunca poniendo todo el peso de la cuestión sobre los laburantes. Es decir, discutamos salario, pero también precio, cuánto ganan las empresas, qué hacer con los recursos y rememoró la necesidad de que el desarrollo y el crecimiento del país “no se lo queden cuatro vivos”.
En orden, pero siempre en relación con lo económico, planteó el problema de los modelos de país divergentes y acusó a la derecha argentina de no sentarse a discutir cuestiones básicas como el salario, la alimentación, la educación, pero también su vocación por intentar eliminar al peronismo de la arena política. «Si fuera posible ya la hubieran hecho, pero el peronismo siempre resucita» dijo la vicepresidenta y criticó los discursos neoliberales de la oposición señalando su carácter antiguo y recurrente en fracasos. Planteó que la ola de gobiernos progresistas en Latinoamérica fue el verdadero cambio, que todo lo que pregona la derecha ya se hizo y ya fracasó.
Por otro lado, hizo mención a los efectos de los programas económicos neoliberales y a los serios condicionamientos que pusieron sobre el ejercicio de la democracia. Por el lado la deuda, que obliga a gastar recursos del país en pago de intereses en vez de crear valor agregado o inversión. Por el otro, la intromisión nuevamente del Fondo Monetario en las decisiones económicas que en la práctica redunda en un acuerdo impagable, menos herramientas de gestión y la supervisión de sus dirigentes todos ellos conducidos por intereses de potencias extranjeras.
El Lawfare y los recursos
Cristina vinculó además y de manera directa el mal funcionamiento de la economía y el desorden social a la intromisión del poder judicial en decisiones que no le competen como las de carácter económico. Según afirmó CFK no tiene sentido en la modernidad y la actualidad que el destino jurídico de las personas esté decidido por funcionarios que gozan de privilegios inamovibles y que se regulan a sí mismo. También vinculó la corrupción del poder judicial con los procesos de persecución política en toda Latinoamérica y señaló que son el instrumento, el partido que sirve para lograr los intereses de los sectores concentrados. Mencionó el caso Lula pero también la manera en que la justicia argentina favorece desde siempre los intereses del grupo Clarín, y que esta influencia espuria en la vida política debe terminar.
¿Cristina presidenta?
CFK recordó al ex presidente Néstor Kirchner y su gestión política en los distintos cargos que supo desempeñar. En el acto de la UOM algunas de sus frases dejaban entrever la posibilidad de una candidatura, aunque todo quedó en ambigüedades. Sin embargo, en esta oportunidad las respuestas al canto «Cristina Presidenta» no fueron de negación si no de paciencia y mesura. El acto dejó en claro que Cristina sigue siendo la figura política de mayor volumen del país y que ha ampliado discurso en muchas áreas. Sin embargo, lo más destacable fue la idea de que «podemos volver a ser esa Argentina que ponía satélites en órbita.» Quedan pendientes los cómo, pero la voluntad de crear un horizonte de futuro y salida de la crisis está clara. ¿Será finalmente la candidata que se oponga al status quo dentro y fuera del peronismo? Habrá que esperar…
Presencia rodriguense en el acto
En el acto de Cristina Fernández de Kirchner en el Estadio Único ¨Diego Armando Maradona¨ se hicieron presentes agrupaciones políticas rodriguenses, figuras destacadas del ambiente sindical y referentes políticos. La agrupación peronista 13 de Abril, comandada por Reinaldo ¨Cartu¨ Torres, viajó hasta la ciudad de La Plata con un colectivo repleto de militantes. La Seccional de Atilra General Rodríguez movilizo un importante contingente de trabajadores y trabajadoras lecheros hasta el estadio, entre ellos se encontraba el Secretario Gremial del Consejo Directivo Nacional y Secretario General de Seccional de Atilra General Rodríguez, Heber Ríos. También concurrió al evento el Intendente de General Rodríguez, Mauro García.