En el marco del congreso anual, los sindicatos integrantes de la División Internacional del Sector Lácteo de la Unión Internacional de Trabajadores de la Alimentación, Agrícolas, Hoteles, Restaurantes, Tabaco y Afines (UITA), manifestaron su apoyo por los constantes ataque que viene recibiendo la organización desde el gobierno nacional, las patronales y los medios de comunicación.
El Secretario general de Atilra, Héctor Ponce, y la organización gremial en su totalidad recibieron el apoyo unánime, a propuesta de la delegación de España, de los integrantes de la Unión Internacional de Trabajadores de la Alimentación, Agrícolas, Hoteles, Restaurantes, Tabaco y Afines (UITA), organismo adherido a la Organización Internacional del Trabajo, y que representa a más de 10 millones de trabajadores y se encuentra celebrando en estos días su encuentro ecuménico con la participación masiva de Organizaciones de los cinco continentes, en el marco de la realización de su 27° Congreso Mundial el pasado sábado 26 de agosto.
La iniciativa incluyó la condena a “los constantes ataques que ATILRA viene sufriendo así como por la persecución de la que viene siendo objeto la persona misma del Secretario General de la Organización”.
Asimismo durante el desarrollo del congreso, que finalizó el día viernes 1º de setiembre con la elección de las nuevas autoridades de la Internacional, Alemania y Reino unido realizaron una ponencia conjunta analizada en forma plenaria sobre la situación de todos los representados y las nuevas tendencias mundiales respecto a las relaciones laborales.
La ponencia fundamentó que cuarenta años de doctrinas y hegemonía neoliberal han trastocado sensiblemente el rumbo del mundo, con “consecuencias nefastas a escala planetaria”. Han destacado las falacias de los derrames de riqueza y bienestar “que nunca llegan”, la destrucción de las estructuras sociales y la negación sistemática del interés colectivo, agudas resultantes de políticas capitalistas que generan individuos cada vez más solitarios y menos solidarios.
Ponce pudo intercambiar opiniones con los integrantes de otras delegaciones, entre ellos trabajadores de Nueva Zelanda, relacionados con la empresa Fonterra, que cuenta actualmente con la posibilidad de comprar gran parte de SanCor CUL, mediante la participación mayoritaria en una sociedad anónima que se constituiría a tal efecto.